Las estatuas de Olave, aún sin permiso

El año pasado la alcaldesa local de La Candelaria, Xinia Navarro, le encargó a Jorge Olave la restauración de cinco de las tradicionales estatuas hechas por él, ubicadas en los techos del barrio. Las 15 obras puestas desde en el año 1995, ya se veían deterioradas y los habitantes del sector se habían empezado a quejar. En mayo de 2011, miembros del comité del Instituto Distrital de Patrimonio Cultural firmaron un contrato para arreglarlas y acordaron reparar las demás el siguiente semestre.

El maestro Olave recolectó las estatuas, las valoró y consideró que era más caro restaurarlas que hacerlas otra vez, fue ahí que decidió construirlas de nuevo. Olave terminó las estatuas y las entregó al Comité del Departamento de Patrimonio Cultural y les confesó que él no las había restaurado sino que las había reconstruido por considerar que era más barato.
Patrimonio Cultural determinó que el artista había incurrido en una violación del contrato y las obras fueron decomisadas. Jorge Olave por consiguiente fue puesto en observación por parte del comité.

“La Alcaldesa, como es amiga mía, evitó que yo fuera puesto bajo investigación y me declaró en situación de riesgo por amenazas anónimas y por lo tanto yo tenía que salir del país” confesó el maestro Olave.

Jorge Mallarino, supervisor de proyectos de la alcaldía de La Candelaria, dijo que el artista ya no estaba en medio del proceso porque el pasado 31 de julio habían expirado los términos, sin embargo las obras seguían en La Plaza del Talento porque éstas aún no tenían el permiso por parte de Patrimonio Cultural para ser nuevamente ubicadas.

Por otra parte, Enrrique Pupo, arquitecto y miembro de la fundación Gilberto Alzate Avendaño desde hace 18 años, declaró que el problema se basaba en que la entidad de patrimonio de La Candelaria no emite permisos sino conceptos, es decir, ellos no son los encargados. Según Patrimonio el encargado de dar ese tipo de permisos es Planeación Distrital.

Gustavo Guerrero, secretario del departamento de cultura en la Secretaría de Planeación Distrital, declaró que desde hace dos años delegaron esa responsabilidad directamente a la Alcaldía Local, pues ellos solo se limitan a planear, pensar, proyectar y organizar el desarrollo urbanístico de la capital, no a dar permisos de ninguna clase.

Jorge Olave, todo este tiempo, ha ido de un lado para otro buscando el responsable que tramite el permiso para reubicar sus estatuas. Ayer en la tarde, los miembros del comité de Patrimonio Cultural, con el director de facultades de arte de la Universidad Nacional, con la curadora del Museo Nacional y Jaime Cerón, un crítico reconocido se reunieron con el fin de discutir varios temas entre ellos el caso de las figuras del artista plástico.

El crítico de arte planteó la problemática sobre la burocracia que ejercía la misma alcaldía con los temas de arte en la ciudad y determinó que debería de iniciarse un proceso para que no suceda esto con más artistas. “El arte en todos sus campos debe ser fomentado entre la población, es una forma de expresión que todo mundo tiene derecho, lo que sucede con las estatuas de Olave me parece absurdo y más cuando la misma alcaldía pagó por su construcción”.

El problema finalmente no se solucionó. Aún las figuras siguen en La Plaza del Talento decomisadas, Jorge Olave decepcionado de la alcaldía local y el comité de Patrimonio aún planeando más reuniones para seguir buscando el responsable del permiso que aún no aparece.