12 de septiembre de 2011

Centro Cultural Gabriel García Márquez

Por Daniel Vásquez Jiménez. Facultad de Comunicación Social - Periodismo, Universidad Externado de Colombia.

Bogotá siempre se ha caracterizado por tener espacios de esparcimiento que propicien el aprendizaje.

Es por eso que en la actualidad, los bogotanos cuentan con uno de los mejores espacios para que la lectura se dé, el Centro Cultural Gabriel García Márquez está celebrando el Primer Festival Centro Cultural Gabriel García Márquez.

Habrá una feria patrocinada por el FCE (Fondo de Cultura Económica) en la librería del lugar; Además se llevará a cabo el Primer Encuentro Iberoamericano de Directores de Ferias del Libro; todo en el marco de procurar el mantenimiento de este lugar como uno de los símbolos de la cultura en Bogotá.

El Centro Cultural Gabriel García Márquez es un lugar lleno de historia, academia y arquitectura; su belleza estética y riqueza cultural lo hacen el sitio preferido de muchos bogotanos. Con una perfecta organización y distribución de espacios, este lugar ubicado en la calle once – antiguamente Calle de La Enseñanza – con carrera quinta, es el sitio indicado para combinar belleza arquitectónica con un ambiente propicio para aprender.

A lo largo de cinco siglos, este espacio ha sido testigo de importantes eventos en la historia de Bogotá. Primero, en la época de la colonia, el sitio fue adecuado como el colegio La Enseñanza; lugar donde se educaría a miles de mujeres. Luego, en 1886, abrió sus puertas para erigirse como la Escuela de Bellas Artes del país. Posteriormente, la edificación fue demolida en 1920 para dar paso al Palacio de Justicia; sin embargo, lo hechos del bogotazo dejaron el lugar en llamas y convertido, en años siguientes, en un parqueadero.

Pero sería la iniciativa del Ministerio de Cultura y el FCE la que daría paso a una de las construcciones más impresionantes del centro de Bogotá. El Ministerio y el FCE aportaron el dinero para llevar a cabo la edificación, y el encargado de imaginar toda la arquitectura del lugar sería Rogelio Salmona. La obra se inició en noviembre de 2005 y concluyó el 30 de enero de 2008.

La consolidación de este escenario ha sido con esfuerzo y a través del tiempo se ha ganado el reconocimiento que se merece un espacio dedicado a la cultural y la lectura, asegura Jacobo Celnik, jefe de prensa del lugar. También afirma que “ha sido el apoyo del Distrito, de las universidad, de los estudiantes, de los maestros y la buena administración de la cultura local, lo que ha permitido que seamos el mayor impulsor de la cultura en el sector, y una de las fuentes literarias más ricas en la ciudad”.

El gerente general del lugar, Juan Camilo Sierra, afirma que es una ventana de Bogotá para el mundo “El Centro Cultural Gabriel García Márquez tiene como función educar y entretener por medio de un arma que muchos bogotanos han dejado a un lado, la lectura. Fue construido de esa forma y con esa belleza de arquitectura, para atraer a bogotanos y extranjeros a que se diviertan un rato con la cultura mundial, porque aquí se puede encontrar al mundo en los libros”.

“Suele haber cantidad de eventos gratuitos para toda la comunidad, sin embargo, hay otros eventos, como exposiciones privadas y conferencias especiales que son muy costosas por el nivel de invitados que traen, también el precio de los libros y el restaurante del Centro Cultural son algo altos”, dice Maritza Toro, universitaria de la zona.
Y en eso coinciden la mayoría de transeúntes y habitantes del sector; en que se ha convertido en sitio de encuentro y tertulia académica; además el barrio La Candelaria ofrece un sinnúmero de ventajas para que el Centro Cultural tenga mucho más impacto. Éste está rodeado de 29 universidades, 24 planteles educativos de educación primaria y secundaria, 58 entidades de carácter cultural y 7 bibliotecas; todo en un radio de dos kilómetros.

Uno de los fuertes del Centro Cultural ha sido la organización de eventos dedicados a la literatura y el aprendizaje audiovisual; por eso cada año se desarrollan festivales y encuentros con múltiples figuras del área de la comunicación y las letras. Personajes como Germán Castro Caycedo, Joaquín Botero, José Navia, Santiago Roncagliolo entre muchos otros han brindado su presencia y conocimientos a los visitantes del sitio, asegura Valentina Henao, coordinadora de eventos especiales del Centro Cultural.

Además de ofrecer espacios únicos en Latinoamérica dedicados a la lectura, y de tener en su biblioteca más de 90.000 ejemplares, cuenta con una sala de exposiciones de 216 metros cuadrados, un auditorio para 325 personas, una sala audiovisual con capacidad para 40 personas, dos aulas alternas con capacidad para 35 personas cada una y una sala infantil donde los pequeños encuentran quien les lea un cuento, hasta juegos para poder pasar un rato de aprendizaje.

Los bogotanos podrán seguir disfrutando de un lugar como este, propicio para leer y empaparse un poco de eso que a veces parece tan distante: la cultura y el aprendizaje. Es por eso que la administración del lugar está preparando una serie de eventos para el próximo mes.

Exposiciones de fotografía encabezadas por el fotógrafo mexicano Armando Herrera, exhibiciones de arte en muñecas japonesas y el festival anual “Visiones de México en Colombia” se realizarán en el mes de septiembre para que todos los bogotanos observen y disfruten de estas actividades que muy pocos países en Latinoamérica tienen el placer de tener.